Al reabrirse su caso y ser puesta en libertad, Luisa quiere recuperar el tiempo con sus hijos, pero Pablo no confía en ella y la quiere ver de regreso en la cárcel.
Domingo se siente en las nubes con un nuevo amor, pero Julia no permitirá que alguien más tome su lugar, así tenga que dejar en la calle al hombre que no dejará ir.